viernes, 30 de noviembre de 2012

FILOSOFIA MITOCRÁTICA AYER Y HOY

FILOSOFIA MITOCRÁTICA AYER Y HOY
Gustavo Flores Quelopana
Miembro de la Sociedad Peruana de Filosofía

 

  1. ¿Cómo se puede definir la Filosofía mitocrática?
Como la búsqueda de los fundamentos del mundo a partir de presupuestos mítico religiosos.

  1. ¿Cómo es posible que el fundamento mítico religioso haga posible una búsqueda filosófica?
Por una preocupación por la creación del mundo, el origen de los dioses y el destino del hombre.

  1. ¿Por qué esta meditación es filosofía y no simplemente religión?
Por su carácter explicatorio del origen y destino de las cosas.

  1. ¿Puede la fe de la creencia mítico religiosa ser la base del filosofar?
Sí, pero de un filosofar unido a la tradición y no separado de ella.

  1. ¿En dónde se hace presente este tipo de filosofar?
En las civilizaciones ancestrales orientales, especialmente India, China, Babilonia, culturas precolombinas.

  1. ¿Cuál es el aparato lógico en que expresa la filosofía mitocrática?
No es a través de la lógica identitaria del concepto, sino, por medio de la lógica metafórica de la armonía de los opuestos.

  1. ¿Existe algún gran libro que lo ilustre?
Sí, por ejemplo, el libro del Tao, los Upanisads, el libro egipcio de los muertos.

  1. ¿Y existe algo por el estilo en el mundo prehispánico?
El Popol Vuh, mitos y tradiciones orales, amén de de ingente evidencia destruida durante la extirpación de idolatrías.

  1. ¿Por qué, entonces, esta forma de filosofar declina en Grecia?
Porque Grecia es la cuna de otro tipo de hacer filosofía basado en la razón y no en la tradición.

  1. ¿Y por qué la forma de filosofar de origen griego ha monopolizado el concepto de filosofía?
No sólo por sus prodigiosos representantes y gran desarrollo teórico, sino, porque es la base del pensamiento científico moderno y por pensarse anacrónicamente que lo religioso siempre estuvo separado del filosofar.

  1. Si se admite un filosofar mitocrático anterior al filosofar identitario griego entonces, ¿por qué no suponer otro tipo de filosofar anterior al mitocrático y así sucesivamente?
Afirmo que el filosofar es una situación inherente a la condición humana, es más, es un factor decisivo que humaniza al hombre, la filosofía en sus distintas formas es siempre la misma, esto es, el hombre que se asombra ante el enigma del mundo, enigma que lo asedia, amenaza y lo incita a pensar.

  1. ¿Aquí estamos hablando de un filosofar puro o de uno que está mezclado con la religión y lo pre-científico?
En los comienzos de la humanidad no hay separación entre filosofía, mito, religión y ciencia, lo cual es un producto tardío que se decantará con los siglos.

  1. Si es así, entonces, ¿por qué insistir en la denominación de “Filosofía”?
Porque con el adjetivo “mitocrático” que se le adjunta se describe otra forma de hacer filosofía, diferente y anterior a la griega y que tuvo el propósito de dar al hombre una orientación fundamental en el mundo.

  1. ¿Esta forma de filosofar ancestral fue superior a la actual?
Sí, superior en la penetración y percepción del mundo espiritual e inferior en el dominio material del mundo. No tuvo la precisión prometeica que la humanidad va adquirir con la civilización occidental.

  1. Si fue superior en lo espiritual, entonces, ¿cómo se explica que el cristianismo sea decisivo en el orbe occidental más no en el oriental?
En  primer lugar, el cristianismo como religión revelada es la culminación de la cultura mitocrática que se impondrá en Occidente gracias a una síntesis con la cultura logocrática griega. Y en segundo lugar, el carromato de las viejas tradiciones religiosas mundo oriental estaba sometido a las sacudidas de nuevas corrientes espirituales. Por lo tanto, cuando surge el cristianismo entre los judíos el resto del mundo oriental no experimentaba ni fatiga ni declive religioso, sino, las sacudidas dadas siglos antes por el taoísmo y el budismo.

  1. ¿Nunca más volverá  el filosofar mitocrático ancestral?
Como fue en el mundo ancestral está definitivamente muerto, pero en su estructura lógico-racional no lo está, porque pertenece a la forma misma del pensar humano. La razón humana oscila constantemente entre el logos de la ratio y el logos del mytho, porque el hombre es al mismo tiempo razón y fe, no podemos de dejar de manejarnos sin el principio de identidad y sin el principio de la armonía de los contrarios. Por eso calculamos pero a la vez poetizamos y nos enamoramos. Esta aparente contradicción es parte de nuestra humana manera de percibir la realidad. Lo cual no sólo es una realidad antropológica, sino, que forma parte de las riquísimas perspectivas de la realidad misma. Por ende, lo más sensato para el hombre es procurar siempre una síntesis armoniosa, aunque nunca conclusa mientras estemos en este mundo, entre el logos de la ratio y el logos del mytho.

  1. ¿Qué beneficio tendrá dicha síntesis en el mundo actual?
En medio del desastre climático que se avecina de forma inminente y de la persistente irresponsabilidad humana en el trato con nuestro planeta azul y con nuestros semejantes, es necesario devolver al mundo ese sentido de caridad que actualmente se ha perdido con la despiadada globalización del hiperimperialismo que ha hecho trizas la ecología. Y la caridad es el núcleo y la piedra de toque del filosofar mitocrático, porque está presidido por ese afán reintegrador con el cosmos y todo lo viviente.

  1. ¿La civilización que sobreviva a la nuestra será más mitocrática que la actual?
La civilización actual que destruye la naturaleza ha sido logocrática, al estar atenta a lo objetivo ha descuidado lo subjetivo y lo cualitativo, lo no medible y calculable, y aunque la razón científica en la presente fase neotécnica de nuestra civilización ya comenzó a girar hacia lo no mecánico y a estar más atenta a lo cualitativo, orgánico y vital, sin embargo, la hora histórica le queda demasiado corta, sobretodo porque las decisiones van más allá del ámbito científico-técnico e involucra lo político. En este sentido, la civilización logocrática deberá emprender velozmente su aproximación a criterios mitocráticos para sobrevivir. De cualquier manera, si ahora no lo hace será esa la lección que le legue a la civilización venidera, que sin duda será más religiosa y piadosa que la descreída y pragmática y anética civilización actual.

Lima, Salamanca 30 de noviembre 2012